Blog > Diferencias entre puerta blindada y puerta acorazada
La seguridad del hogar es una prioridad para todos. Al pensar en la seguridad de nuestro hogar o negocio, tenemos a la opción de elegir entre puertas blindadas y acorazadas. Entender las diferencias entre ambas es clave para tomar la mejor decisión.
Las puertas blindadas fueron en su momento la opción más segura para proteger el hogar. Las puertas blindadas se componen de un marco y una hoja de madera reforzados con una chapa de acero. La estructura interna incluye refuerzos metálicos, lo que les da una apariencia robusta. Sin embargo, su cerradura está alojada en la madera, lo que representa una debilidad significativa. Esta configuración las hace vulnerables a herramientas comunes utilizadas por ladrones, como destornilladores o patas de cabra. Con el tiempo, debido a la naturaleza de la madera, estas puertas pueden ceder, especialmente en la zona de las bisagras, haciendo que la puerta se descoloque.
En términos de mantenimiento, las puertas blindadas presentan desafíos. Los tableros adheridos a la hoja principal son difíciles de reemplazar en caso de daño o si quieres actualizar la estética. Con el avance de las técnicas de robo, las puertas blindadas han quedado obsoletas en términos de seguridad.
Las puertas acorazadas representan un nivel superior de seguridad. Estas puertas están construidas con un cerco y hoja de acero, lo que les confiere una resistencia mucho mayor. A diferencia de las puertas blindadas, la cerradura está incrustada en el acero, ofreciendo una protección más robusta contra intentos de intrusión.
Una puerta se considera acorazada cuando, además de su estructura metálica, cumple con normativas de seguridad europeas. Las puertas acorazadas certificadas con niveles de seguridad a partir de RC3, según la norma UNE EN 1627:2011, garantizan una resistencia mínima contra ataques. Estos niveles de seguridad se logran tras pruebas en laboratorios especializados, donde se someten a ataques con herramientas específicas durante un tiempo determinado.
Además, las puertas acorazadas cuentan con cerraduras y cilindros certificados, acompañados de protectores con placas antitaladro y antiextracción, lo que dificulta enormemente su manipulación por parte de intrusos.
Cuando se trata de seguridad, las puertas acorazadas superan ampliamente a las blindadas. Las primeras están diseñadas para resistir intentos de robo más sofisticados y prolongados, mientras que las puertas blindadas, si bien ofrecen una resistencia básica, no son suficientes para disuadir a ladrones experimentados.
En cuanto al mantenimiento, las puertas acorazadas también presentan ventajas. La estructura metálica no se deforma con el tiempo, y sus componentes están diseñados para ser duraderos y resistentes al uso diario y a las inclemencias del tiempo.
La elección entre una puerta blindada y una acorazada depende principalmente de tus necesidades de seguridad. Si vives en una zona con bajos índices de criminalidad y buscas una opción más económica, una puerta blindada podría ser suficiente. Sin embargo, si la seguridad de tu hogar y seres queridos es una prioridad, una puerta acorazada es la opción más recomendable.
Las puertas acorazadas no solo ofrecen una protección superior, sino que también proporcionan una mayor tranquilidad. Con una puerta acorazada, tienes la certeza de que estás utilizando una de las mejores opciones disponibles en el mercado para la seguridad de tu hogar.
La evolución de las técnicas de robo ha dejado atrás a las puertas blindadas, mientras que las puertas acorazadas han emergido como la opción más segura y confiable. Invertir en una puerta acorazada es invertir en la tranquilidad de saber que tu hogar está protegido con los mejores estándares de seguridad disponibles.